"Perder peso en una semana"
"La dieta de los famosos"
"La dieta de los famosos"
"Bajar de peso rápido"
"Pierde kilos sin esfuerzo"
"Redusca tallas al instante"
"Redusca tallas al instante"
"Las dietas relámpago"
¿Cuántas veces hemos visto anunciado esto en los medios?, o escuchamos testimonios de personas que dicen "con este polvo comía lo de siempre y perdía mucho peso", "encontre esta semillita milagrosa que me hizo perder 20 kilos", "El aparato de ejercicio que quema grasa rapidísimo", etc.

La clave o el éxito de los productos milagro, radica en atacar a una sociedad que "no tiene tiempo", que exige una gratificación inmediata a sus deseos, con el menor esfuerzo y tiempo de espera posible. Esto nos recuerda, por ejemplo, a la creación de la Comida Rápida o Fast Food, que precisamente es eso, una satisfacción inmediata y sin esfuerzo, e irónicamente, una de las principales causas de la obesidad en México y el mundo.
Estos productos (en caso de que funcionen), piden como condición ser complementados con una dieta balanceada y ejercicio (lo cual es la verdadera clave para la pérdida de peso, sin necesidad de adquirir ningún producto extra). Estos químicos o "semillas", generan una necesidad de seguir comprando este producto alimentando el temor a engordar si se le deja de consumir, y se ingieren con regularidad, generando, en ocasiones, una adicción por parte del organismo a su consumo, o por otra parte, pueden tener algún nivel de toxicidad, poniendo en riesgo la salud, o limitando la asimilación de los nutrientes esenciales que proporcionan los alimentos.

Querer todo sin esfuerzo es un síntoma de la sociedad actual, y se convierte en un problema de nutrición cuándo ni siquiera deseamos preparar nuestros alimentos (el "combustible de nuestro cuerpo"). Además, si aunamos esto a que en nuestra sociedad la delgadez esta sobre estimada, aun a costa de la salud, el tener sobrepeso se convierte en causa de mucha frustración, tristeza, desesperación, y en ocasiones consecuencias mas peligrosas, como depresión o trastornos alimenticios.
La verdadera, permanente y saludable solución para la pérdida de peso, conciste en llevar un estilo de vida sano, buscando una alimentación balanceada, con buenos hábitos para comer y evitar el sedentarismo al buscar realizar alguna actividad física. Esto es, lo que garantiza adelgazar sanamente y sin "efecto rebote".
¿Y qué pasa si por mas que lo intento no sigo la dieta, o se me dificulta mucho seguir los buenos hábitos?

Lic. Mayela E. Pérez
Psicóloga Clínica en Mty. N.L.
Contacto: (81) 89956057 / PsicologaMayela@gmail.com